Hola Familia!
Sabemos lo duro que puede resultar una mudanza, y más aun cuando hemos decidido realizarla nosotros mismos por nuestra cuenta. Tómatelo con mucha filosofía: una mudanza nunca es fácil, y no importa cuánto te organices y lo planees, siempre surgen imprevistos de última hora.
El sofá es uno de los muebles más voluminosos y delicados de una casa. Debido al tamaño y los materiales de los que está hecho debemos prestar especial atención a su embalaje y maniobras durante una mudanza, sobre todo si es especialmente grande o si los pasillos y escaleras por donde ha de pasar son estrechos o angulosos.
Hay que armarse de mucha paciencia para no añadir al cansancio físico el agotamiento emocional. No te desanimes, llénate de buen karma y energía. En nuestra página web podrás encontrar múltiples tutoriales para que vuestra mudanza sea todo un éxito. Si estáis en plena operación embalaje, hoy queremos recomendaros unas simples pautas a seguir para proteger vuestro sofá antes de realizar el traslado.
• El material básico para este procedimiento es plástico tipo film o bien de burbujas o acolchado, mantas preferiblemente acolchadas y cinta adhesiva.
• Embalaremos el sofá con fundas de plástico especialmente diseñadas para ello, que tienen la forma ya del sofá para que se adapte y no haya más que ajustarlo bien con precinto para que no se deteriore.
• Estas fundas las puedes reutilizar para el resto de tu mobiliario y son lo suficientemente fuertes para que en caso de tener que arrastrarse o apoyarse en el suelo no sufra el sofá.
• Si los cojines del sofá son muy voluminosos conviene embalarlos aparte para facilitarnos el paso por las puertas que generalmente se hará en vertical.
• En el caso de que el sofá tenga patas lo más conveniente es quitarlas para que no sean un inconveniente en los movimientos o se puedan romper durante el traslado.
• Si no se pueden quitar: debemos forrarlas con cartón y cinta adhesiva para que no sufran durante el transporte y para que tampoco sufran las paredes de casa en caso de que hubiese algún roce.
• Coloca el sofá en vertical protegiendo antes el suelo y envuélvelo a conciencia con film plástico o plástico burbuja. Así estará protegido del polvo, humedad y hongos que puedan afectarle durante la mudanza.
• Ahora es el momento de cubrirlo con la manta acolchada, o si no se dispone de esta, con mantas normales lo más gruesas posible. Utiliza cinta adhesiva para fijarla lo máximo posible al sofá, no escatimes con las vueltas.
Con estos breves consejos el sofá llegará fácil y en buenas condiciones al nuevo hogar. Esperamos que estos consejos os hayan resultado de gran utilidad. Ahora ya estáis listos para la mudanza y recordad que podéis guardar vuestro sofá en Bilbox, donde os ofrecemos la seguridad y limpieza máxima en vuestro guardamuebles en Bilbao.
¿Necesitas más info? Estaremos encantad@s de ayudarte con todo lo que necesites.
"Equipo Bilbox"
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